Siria: Aliente y ayude a los misioneros cristianos.



Además del trauma y el agotamiento de servir en medio de la guerra en Siria, el líder de un ministerio autóctono tiene otro problema.
"Es un buen problema, pero sigue siendo un problema", dijo. "Tenemos demasiados que están recibiendo a Jesucristo, y no podemos discipularlos a todos como debiéramos".
Si bien un excedente de musulmanes que responden a las Buenas Nuevas es un buen problema, añade a la carga de los misioneros más allá de sus fuerzas. A medida que más almas nacen de nuevo en Alepo, Damasco y otras zonas de Siria los misioneros autóctonos, que se sienten responsables de nutrirlos y discipularlos, son muy pocos, están sufriendo un trauma de segunda mano al presenciar atrocidades o escuchar a las víctimas y trabajan largos días, generalmente durante la noche, siete días a la semana.
"Hay un bagaje emocional", dijo el director del ministerio. "Una niña de 13 años fue golpeada por su fe. Cuando cierro los ojos todos los días, los veo, puedo oírlos llorar".
"Ellos no se toman un descanso, simplemente trabajan, trabajan, trabajan y se cansan y se deprimen", dijo el director del ministerio. "Las oportunidades son enormes, pero no tenemos suficientes misioneros; oramos por ellos y esperamos que se sientan mejor".


El ministerio tiene 31 misioneros en toda Siria, incluyendo 18 en Alepo, donde proveen ayuda y enseñanza a unas 1,000 familias en esa ciudad devastada por la guerra. La mayoría de las personas a las que ministran están desempleadas y el resto gana muy poco. Los misioneros deben decidir quiénes son los más necesitados cuando distribuyen alimentos limitados, artículos de cuidado infantil y otros suministros.
"Cuando los misioneros ven muchas demandas y gente pobre, se desalientan", dijo el director. "Animamos a los misioneros, pero cuando ven todas las necesidades, cuando ven niños enfermos, se cansan emocionalmente y se deprimen".

Esperando ser bautizados.

Los programas para niños son una gran parte del éxito del evangelio. Cientos de niños acuden a los sketches, canciones y otras actividades que eventualmente llevan a muchos de ellos o a sus padres, la mayoría musulmanes sunitas, a poner su confianza en Cristo.
El líder de uno de los equipos del ministerio le dijo recientemente al director que podrían usar más misioneros y más entrenamiento para los niños y otras actividades evangelísticas.
Él dijo: "Tenemos 97 personas esperando ser bautizadas. Nuestro grupo entero ha estado orando para que vinieras lo antes posible para terminar nuestro entrenamiento y tener bautismos. Nos encantaría que vinieras lo más pronto posible para darnos más enseñanza".
Cada día, olas de familias vienen pidiendo ayuda, y los misioneros enfrentan necesidades que anhelan satisfacer - como financiamiento para equipar y capacitar a aquellos que han venido a Cristo.
"Hemos visto tanto fruto y crecimiento de sesiones anteriores de entrenamiento que sería muy decepcionante si no pudiéramos continuar el entrenamiento este año", dijo el director.
Los misioneros están luchando por mantenerse al día con el número de nuevos cristianos que necesitan entrenamiento en cómo compartir a Cristo y cómo hacer el seguimiento de otros creyentes recién nacidos.
"Tenemos creyentes ansiosos, de origen musulmán, que quieren llegar mejor a sus amigos", dijo el director. "Pero hay un problema emocional: Una niña de 13 años fue golpeada por su fe, cuando cierro los ojos todos los días, los veo, los oigo llorar, es muy emocional, rueguen por ellos, oren por aliento".
"Un misionero ha tenido que reubicar a 15 familias, algunas de las cuales fueron abusadas", dijo. "Lo ha visto de primera mano: Los ha visto golpeados, ha visto mujeres violadas".
Ellos regularmente soportan la carga de mantener a los nuevos cristianos a salvo de los musulmanes de línea dura.
"Un misionero ha tenido que reubicar a 15 familias, algunas de las cuales fueron abusadas", dijo. "Lo ha visto de primera mano: Los ha visto golpeados, ha visto mujeres violadas".
Con la ayuda de los patrocinadores de Christian Aid Mission, el ministerio autóctono trasladó a las 15 nuevas familias creyentes a lugares seguros donde se esconden, pero el director dijo que el financiamiento para los costos de mudanza recientemente se agotó. Cada mes deben reubicar a nuevos cristianos, costando a menudo entre US$ 2,500 y US$ 3,000 por familia.
Los nuevos cristianos en Alepo no pueden ser reubicados dentro de la ciudad porque los islamistas hostiles los encontrarán; deben ser reasentados en otro lugar. Los costos de transporte y alquiler son altos.
"Esto es siempre una necesidad urgente", dijo el director. "Las palabras no pueden expresar cuánto se necesita".

Vidas en Peligro.

Los misioneros han llegado a conocer y amar a dos familias que necesitan urgentemente ser sacadas de Alepo porque su fe en Cristo ha enfurecido a los musulmanes del área.
En una de las familias, una mujer que perdió a su marido en los tiroteos en Alepo ahora está recibiendo cartas que amenazan violencia debido a su fe. Ella está en grave peligro. En la otra familia, niños de 2, 6 y 8 años corren el riesgo de perder a sus padres por islamistas vecinos que creen que mutilar y matar a los que abandonan el Islam es una responsabilidad dada por Alá. Cuesta US$ 1,000 cada uno para evacuar a estas familias.
El director del ministerio pide oración por los muchos ex musulmanes que renunciaron a tanto, respondiendo valientemente al llamado de Cristo, y pide oración por aquellos que los están discipulando.
"El ministerio en Siria existe gracias a Christian Aid Mission - sólo ustedes nos están ayudando", dijo. "Hacemos todo lo posible con lo que ustedes nos dan".
¿Va a considerar una ofrenda para alentar y permitir que los misionero autóctonos traigan alivio y salvación a los sirios que sufren?

Fuente y apoyo: http://www.christianaid.org/News/2017/mir20170831_esp.aspx